domingo, 10 de agosto de 2014

UN BUEN MAESTRO PONE ANTENAS A SUS ALUMNOS

Decía ya hace mucho tiempo Paulo Freire: "Enseñar no es transferir conocimiento, es crear la posibilidad de producirlo". Esta frase tan certera me ha hecho ver que lo mejor que podemos hacer los maestros es poner antenas en las cabezas de nuestros alumnos y que ellos sean los verdaderos protagonistas y responsables de su aprendizaje

En la actualidad nuestros alumnos no necesitan que les demos conferencias en el aula. Necesitan motivación, empatía y ayuda para descubrir y desarrollar sus pasiones personales. 

En nuestro día a día podemos observar como los alumnos aprenden a "jugar a la escuela". Perfeccionan el arte de ajustarse a los requisitos de cada maestro. El resultado de esta situación es que están más preocupados por obtener una buena calificación que por aprender. Y es una lástima que midamos el éxito por la capacidad para recordar información, por ser capaces de "regurgitar" información. Les decimos qué deben aprender, cómo aprenderlo, cuándo hacerlo y cómo demostrarnos que lo han aprendido.

Siete pasos para "poner antenas":

1. Inspirar, animar, escuchar y ofrecer perspectivas a nuestros alumnos.
2. Provocar la reflexión.
3. Utilizar modelos que les permitan descifrar y resolver cuestiones relacionadas con el mundo real.
4.  Permitirles ser actores críticos sobre la información, las preguntas y las respuestas. 
5. Alejarnos del modelo tipo "abrimos la página 70, leemos... y contestamos...".
6. Dejar de ofrecer tantos pensamientos ya masticados y hasta digeridos.
7. Enseñarles a enseñarse a sí mismos.